diseño encantador, buen baño, excelente café disponible en la habitación

No ofrecen desayuno totalmente incluido, el ruido del bar y la avenida es insoportable, pequeñas ventanas que no aíslan el sonido, falta de aire acondicionado, ausencia de ascensor para quienes necesitan ayuda!!!

Ay, la gastronomía de aquí es una joya! Me enamoré de la sopa que hablaba en susurros de maíz y chiles, una explosión de sabor que me llevó directo a la gloria culinaria. Además, el hotel tenía esa vibra acogedora con almohadas que te abrazan. La habitación era tan cómoda que hasta danzaría un son jarocho en ella.

Sin embargo, la experiencia fue un poco agridulce. Me cobraron por separado las noches de mi reserva, algo confuso que me dejó con una 'Recurrente' en mi cuenta que no entendí. Aparte, una señora de limpieza tiró algo que necesitaba y aunque parecía un error, su actitud no fue la mejor. Aún así, todo brilló a su manera.

El diseño de las habitaciones es bastante atractivo.

El ruido de la calle fue simplemente intolerable, no pude descansar bien ninguna de las noches que estuve ahí. Además, el bar dentro del hotel generaba un estruendo que me impidió dormir, lo que fue muy decepcionante. Las ventanas son pequeñas y no hay aire acondicionado, así que no puedo entender cómo esperan que uno disfrute de la comodidad durante su estancia.

- Bonita decoración
- Buen café
- Excelente presión de agua

- Ruidos del bar
- Ausencia de ascensor
- Desayuno limitado

La habitación era muy acogedora y contaba con excelentes almohadas y sábanas. Además, el café de la habitación era un detalle agradable que disfrutamos cada mañana. La ubicación es perfecta, ya que está cerca de una gran variedad de restaurantes y a un paso del mercado de San Ángel, lo que añade un encanto especial a la estancia. está muy cerca de la estación de metro, facilitando los desplazamientos por la ciudad.

El ruido de la calle era un poco molesto durante la noche, dificultando un buen descanso.

La habitación es realmente bonita y cómoda, con excelentes almohadas y un baño que merece un aplauso. Pude relajarme en la terraza al sol y disfruté de un masaje de cuerpo completo que me dejó como nuevo. Solo un detalle a considerar, el ventilador en mi habitación no era suficiente para los días calurosos, pero en general fue una estancia fantástica. 🌞

El barrio es encantador, pero ruidoso.

Me alojé en una habitación doble presupuestaria y la decoración era bastante encantadora. Las sábanas suaves y cómodas me hicieron sentir como en casa al instante. Tuve la oportunidad de disfrutar de un café recién molido cada mañana, lo cual era un gran detalle y me gustó mucho. Sin embargo, el ruido de la calle fue un problema serio. las ventanas pequeñas no ayudaron en absoluto para aislar el sonido y eso afectó mi descanso. El acceso al lugar fue fácil, en la zona de Condesa. Desafortunadamente, no todas las instalaciones funcionaban adecuadamente. el ascensor estaba fuera de servicio durante mi estancia y eso fue un inconveniente, especialmente al estar en un piso alto. El desayuno no cumplió con las expectativas, ya que el menú anunciado no coincidía con lo que realmente ofrecían en el hotel. Además, me sorprendió que no tuvieran opciones más variadas.

una estancia agradable pero ruidosa

Me encantó el tamaño de la habitación, era espaciosa y muy bien decorada. La presión del agua en el baño era excelente, lo que hizo que cada ducha fuera un placer. El café disponible en la habitación fue un detalle encantador que aprecié cada mañana.

El ruido de la calle afectó mi descanso y fue difícil relajarse.

la habitación era espaciosa y muy bien decorada, pero el ruido era bastante fuerte.

La habitación era súper acogedora. La cama y las sábanas eran comodísimas, todo estaba bien limpio. Me encantó que tenían una jarra de cerámica para el agua y un molinillo para el café, lo que hacía que cada mañana fue un ritual agradable. Sin embargo, el ruido del bar que estaba justo abajo fue bastante molesto y no me dejó descansar bien. Aun así, fue un buen lugar para quedarme una noche.

El diseño contemporáneo de la habitación me hizo sentir como un influencer de las redes sociales. Con una vista a la ciudad que tenía más encanto que un perro en un café, cada mañana era un nuevo comienzo. El restaurante ofrecía platillos tan sabrosos que podrían hacer que un taco llorara de envidia.

Ruidos ocasionales

Un lugar acogedor con el mejor café

Nos quedamos 3 noches y la pasamos bomba. La habitación era super cómoda, con sábanas suaves. Cada mañana, nos hacíamos un cafecito con el molinillo y la cafetera que tenían. Un detalle que me encantó fue la jarra de cerámica que dejaban para el agua. Eso sí, el ruido de la calle era un poco molesto y no dejaba descansar bien.

la ubicación está super chida, en el corazón de la condesa. el cuarto era súper acogedor, con decoración linda y la presión del agua en la ducha era increíble. el staff fue muy friendly y siempre ayudando con todo. tenías café y unas galletas frescas en la habitación, un detallazo que me encantó. en general, me sentí como en casa y definitivamente volvería.

pero el ruido de la calle era un poco molesto y a veces no dejaba descansar bien. además, el bar en la planta baja hacía bastante bulla y eso fue medio incómodo.

El diseño de la habitación es atractivo, pero el ruido del bar fue insoportable.